Tiempos de cambio

Han pasado ya varias horas desde que Ronald Koeman anunciara que el Valencia dejaba la puerta abierta a tres de sus jugadores más importantes estos últimos años: Cañizares, Albelda y Angulo. Mucho se ha comentado desde entonces y opiniones han habido para todos los gustos. Esta es, por el momento y por sus protagonistas, una de las noticias más controvertidas en la historia reciente del valencianismo y, a buen seguro, seguirá generando debate mientras no se confirme la marcha de estos tres emblemas del Club de Mestalla.

A primera vista, el método empleado por el Valencia C.F. para dar salida a estos futbolistas se ha alejado de lo que se podría considerar adecuado en una situación como la actual. Sí que parecía claro que la situación crítica que estaba atravesando el equipo necesitaba de algún golpe de efecto añadido, por lo que la enigmática situación del vestuario ha podido ser la principal causa de tan impactantes medidas. Aunque es cierto que éso solo lo saben los protagonistas y nadie más que ellos. Al igual que se hace cuando se habla de fichajes, la información en estos casos es filtrada a cuentagotas y muchas veces el debate se lleva a cabo según la simpatía que se tenga por cada uno de los interesados. En este sentido, es muy probable que se olvide que los malos modos que se le achacan y achacarán al Valencia en esta situación, son muy similares a los que algunos de los protagonistas utilizaron en años anteriores para renovar y mejorar sus contratos cuando el equipo se lo jugaba todo o estaba en una situación delicada. En ese momento ya fuimos el hazmerreír. Y tampoco debemos olvidar o, mejor dicho, debemos recordar las lamentables actuaciones de algunos profesionales en cuestión de imagen, que han llevado al Valencia a no poder renovar el patrocinio que tiene hasta el final de la temporada con una importante marca automovilística. O los casos en los que se han antepuesto intereses personales a los de la Entidad a la hora de atender a ciertos medios periodísticos que son, ni más ni menos, la fuente de información de la afición valencianista. Comentados estos precedentes y obviados otros que no cabe aquí citar, no debe sorprender a nadie, ni mucho menos a los que han participado en esas situaciones, que el Valencia, en algunas ocasiones, haya parecido o parezca más un sainete que un club de fútbol.

Ni de todo lo anterior, ni de la crisis deportiva actual son, quizá, únicos responsables los protagonistas de esta rocambolesca historia. Más bien, por lo que parece, son los primeros en pagar los platos rotos de una situación interna que probablemente vaya mucho más allá de lo que se está comentando. Las injusticias, aunque se dan, no suelen ser habituales en el fútbol a tan alto nivel y menos si nos referimos a de jugadores emblemáticos con los que un club se juega gran parte de su patrimonio económico y social. Y sí, es posible que los ahora "señalados" tengan y hayan demostrado un gran amor y dedicación por el Valencia. Pero como se está comentando muy acertadamente, su vida deportiva aún no ha acabado, ni mucho menos su etapa e historia en el Valencia. Aunque de forma distinta, aún van a tener algo de tiempo y muchas situaciones para demostrar que el apego que sienten por el Club donde han han hecho historia es, como mínimo, el mismo que tenemos todos los valencianistas que les hemos venido animando y siguiendo todos estos años. Por el momento, el mensaje está en el aire. Esperemos que sirva de algo...

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Perdidos

El Valencia cerró su participación europea en la noche de ayer consiguiendo un milagroso empate a cero en casa del Chelsea que, eso sí, no le sirvió para continuar en Europa al no cumplirse el resultado que esperaban los de Koeman desde tierras germanas.

Ese es el análisis objetivo. Personalmente me gustaría ir un poco más allá. Lejos de tonterías de sistemas, Vicentes por derechas o izquierdas o la incógnita del porqué del resurgimiento de Cañizares en un partido que parecía, como así fue a la postre, un puro trámite, el objetivo debe virar hacia cimas más altas de reflexión. El Valencia, club de fútbol, está sumido en una crisis de identidad y a todos los factores que venimos comentando las últimas semanas, se añade la impotencia de no saber en qué momento se tocará la tecla adecuada que lleve todo a un estado de cierta normalidad. El equipo deambula, parece fundido y sinceramente no pienso que eso tenga que ver con aspectos meramente tácticos ni técnicos.

La situación heredada y estancada está llevando al grupo a "resetearse", a comenzar a funcionar como lo haría cualquier squadra con un entrenador nuevo a estas alturas de la temporada. El tiempo apremia al mismo ritmo que lo hacen los nervios y los debates en torno al equipo. Cuando todo parece dicho y aplazados los análisis, es "espacio" lo que parece necesitar el Valencia para poder arrancar y alcanzar cierta velocidad de crucero en clave optimista. Eso sí, mientras tanto no vendría nada mal alguna nota positiva que endulzara considerablemente la travesía...

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"El detalle": Djalminha según Xentinho

En un día en el que podríamos hablar de la resaca del partido del Valencia ante Osasuna (mis disculpas por no haber actualizado el blog este pasado puente) o del compromiso que mañana los de Koeman tienen ante el Chelsea en la Liga de Campeones, hoy se reabre esta sección para recibir a un gran amigo y amante del buen fútbol. Su nombre es Xente, pamplonica de nacimiento y deportivista de corazón, en el día de ayer fue el cumpleaños de su ídolo, el polifacético jugador brasileño Djalminha, y por ello ha tenido la gentileza de dedicarle unas palabras en este blog llenas del salero y desparpajo que le caracterizan. Dice así...

"Djalma Feitosa Dias, Djalminha, empezó en 1984 con 14 años en la cantera del Vasco y debutó con el Flamengo gracias a Tele Santana en 1990, donde le apodaron el "heredero de Zico" por su creatividad y talento innato creando jugadas impensables. Allí se alzó con un Campeonato de Brasil para más tarde jugar en el Guaraní y recalar finalmente en el Palmeiras en 1995, tras un breve paso por el Shimizu japonés. En ese mágico equipo, coincidió con jugadorazos de la talla de Cafú, Júnior, Flavio Conçeiçao, Rivaldo, Müller y Luizao, lo que unido a su magia le llevó a conquistar el Balón de Oro brasileño en 1996.

Sus regates y habilidad le llevaron a firmar por el Depor al año siguiente junto a Flavio y Luizao, con el objetivo de hacer olvidar la sonada marcha de Rivaldo al Barcelona. Nunca se sabrá que hubiera pasado con ese depor "bi-crack" si ambos astros brasileños hubieran coincidido en el mismo equipo pero aún así, como dijo el general Julio César,"veni,vidi,vici": Djalminha vino,vió y venció. En 6 años lo consiguió todo: 2 Supercopas; la Liga en el 2000 jugando 31 partidos y marcando 10 goles y su éxtito más sonado, el centenariazo del 2002 al ganarle la la Copa del Rey al Real Madrid en el Bernabéu, éxito que hizo que el Depor se conociera en medio mundo.

Después de esto se marchó a jugar al Austria de Viena, donde consiguió la liga austríaca. Volvió al Depor al año siguiente y aún disputó varios partidos para finalmente jugar en el América de México donde se retiró por las lesiones a los 34 años.

¿Pero por qué un jugador como él nunca fue considerado como uno de los mejores en aquellas épocas que nos hacía vibrar con su fútbol? Djalminha quizás tuvo sus momentos "malos" en aquel cabezazo al entrenador del Depor Javier Irureta del que personas como Sandro Rossell apuntaron como la causa de que Scolari, seleccionador de la canarinha en esos momentos, lo tachara de la lista para ir a un Mundial; o en otra ocasión en la que “calzó” una colleja a Mostovoi en el derby ante el Celta.

Pero estas pequeñeces no pueden hacer olvidar los regates escandalosos que realizó sobre la cancha, como aquel sombrero que realizó a 7 jugadores del Real Madrid y que maravilló a toda una generación; o aquel golazo ante el celta en el que regaló un pase largo de Diego Tristán, que amortiguó el balón con un taconazo para que después el brasileño, una vez driblado el defensa, resolviera poniendo el esférico en la escuadra derecha de Pinto. El portero del Celta no pudo hacer nada, pero es que habría sido una grosería parar ese balón, porque el fútbol se mantiene en la memoria de los aficionados por jugadas como esa. También son inolvidables esos penaltis a lo panenka ante el Real Madrid o ante el Milán en San Siro jugándose el Depor la Champions; o el gol de cabeza ante la Juve tras una contra perfecta; las faltas magistrales que lanzaba con esa zurda endiablada, o, sino, aquella elástica contra el Sevilla andando junto a una serie de recortes con los que dejó en el suelo a especialistas como Edgar David´s. Una vez más , la bella ganó a la bestia.

Así fue el Djalminha futbolista, un tipo al que no le gustaba entrenar y sí jugar. Un tío que no le importaba lo que la prensa dijera de él, sino divertir al anfiteatro y que el público pensara:"que fútbol más entretenido. Este era Djalminha, mi ídolo...Esa persona a la que todos admiramos de pequeño y queremos ser como ella. Éste es un homenaje por sus 37 años cumplidos y por los 16 que nos hizo disfrutar con su fútbol mágico. Un tributo a un señor que hizo grande al Depor y sobretodo al fútbol con el 8 a su espalda. ¡¡DJALMINHA BERDEI!!"

Peor...imposible

Sin garra, sin coraje, sin fútbol...Ayer el Valencia, en palabras de su técnico, tocó fondo regalando de paso a su afición una humillante derrota, que debe sumarse ya a las encajadas por el equipo en la primera fase de la presente temporada. El rival, un cómodo Athletic de Bilbao, tan sólo tuvo que poner las ganas y la picardía, ya que todo lo demás surgió a raíz de la pobre actitud de los de Koeman.

Resultado amplio, aunque no por ello injusto el registrado en el encuentro de anoche en Mestalla. Nada hacía presagiar el 0-3 final, pues se enfrentaban un necesitado Valencia contra el correoso Athletic de Bilbao de Joaquín Caparrós, equipo que no se caracteriza especialmente por su faceta ofensiva ni anotadora. Pero en el fútbol moderno y en una Liga tan apretada, la mayoría de las veces suele ganar el que más empeño pone en ello. Más aún si ese empuje se ve acompañado de buenos tantos como los conseguidos para el equipo vasco por Yeste, de magistral lanzamiento de falta, y Fernando Llorente por partida doble. En el otro lado, nada se puede decir de las ocasiones de un Valencia desdibujado como hacía años no recordaban los incondicionales del equipo.

Muchas conclusiones se pueden sacar en el entorno "Che" viendo los deméritos de un equipo que, desde hace algunos años, camina en una total anarquía producto de la horrenda política deportiva seguida por el club los últimos años. Faltan líderes de verdad, los que hay ni lo son, ni lo demuestran. Su tiempo ya pasó, consiguieron sus jugosos contratos y lo poco que pueden aportar ahora se limita a manifestaciones vacías de contenido y llenas de valentía-cobarde y populismo desmedido. Dejaremos atrás en este momento el aspecto económico, del que tanto gusta hablar a algunos de los que se consideran capaces para guiar al equipo, pero que olvidan que el cariño que sienten ellos, es el mismo que el que demuestran la gran mayoría de aficionados siguiendo semana a semana al equipo. Faltan, en definitiva, un puñado de buenos jugadores que de verdad puedan formar una plantilla acorde con las exigencias de un club de fútbol como el Valencia.

Y sobran jugadores que entienden poco o nada de fútbol y de lo que significa para sus aficionados; los que perdieron la ambición y el carisma hace años; los poco profesionales y los que no tienen nivel para jugar en este equipo. Por el momento, ya han conseguido faltar el respeto a la entidad y a sus seguidores, que están olvidando poco a poco lo que es la ilusión por su equipo. El único y mínimo consuelo es que quizá se esté a tiempo de acabar el ciclo dignamente, aunque si el giro no se da con presteza, las consecuencias de un año nefasto hipotecarán, a buen seguro, el futuro más próximo del club y el de su único mandatario.

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Una vez más, sin orden ni concierto

Rácing de Santader y Valencia se batieron ayer en un duelo del que los primeros salieron victoriosos por orden, fe e insistencia. Derrota más que preocupante sintomática para los de Mestalla, puesto que ya se está convirtiendo en algo habitual el hecho de que el equipo alterne partidos trabajados con otros, más bien, de total despiste y desconcierto.

En una semana en la que la se había hablado más de la selección, de las ovejas negras y de virus como el Fifa y el de la gripe, el Valencia afrontó el partido ante el Rácing como una oportunidad para demostrar que, en pocos días, el mensaje del nuevo técnico Ronald Koeman había calado en el equipo. Las intenciones parecían buenas, pero con la mayoría del equipo dando vueltas alrededor del mundo por los compromisos internacionales, lo más probable era que, como mucho, se llegara a Santander con el empuje y los métodos empleados semanas antes para ganar al Murcia. Eso sí, en este caso iba a ser más complicado, pues enfrente se encontraba la tropa de Marcelino García Toral que venía acumulando un total de 7 partidos sin perder en la competición doméstica.

Al igual que el año pasado, el técnico asturiano ex del Recreativo de Huelva volvió a ganar la partida, dejando de paso al aire las vergüenzas de un Valencia que pareció algo más que deslavazado en ciertas fases del encuentro. Detalles como el de no realizar un lanzamiento a portería casi hasta el minuto 70 de partido dicen muy poco del equipo visitante y mucho en favor de un equipo local que, con limitados recursos, está realizando una temporada meritoria en un año que se presumía difícil por la escasez de fichajes. Por tanto, lección de humildad y trabajo la de ayer por parte del Rácing y de su técnico, que augura una temporada cuanto menos tranquila y esperanzadora para la parroquia santanderina. Y sí, aún con todo ello, se dirá que el Valencia pudo haber salvado un punto en el encuentro de ayer si no hubiera sido por el error de Cañizares en el gol de Jorge López, compañero de equipo del portero hasta el año pasado. Aunque también en esta ocasión, viendo el transcurrir del partido, debería comentarse en favor del de Puertollano que ya tuvo bastante con salvar los muebles más de la cuenta.

En fin, derrota para analizar, para aprender y para mejorar, puesto que de nada sirve lamentarse en un deporte en el que, la mayoría de las veces, pasar página supone volver a caer en los mismos errores. Apuntar como dato positivo la reaparición del brasileño Edu en las filas valencianistas, despues de más de un año alejado de los terrenos de juego por culpa de una lesión de rodilla. Ojalá esta vez vuelva para quedarse ya que el Valencia y la afición se lo agradecerán a buen seguro.

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La fórmula del éxito

Tras el palo en Champions del martes pasado, donde una derrota ante el Rosenborg dejó al Valencia C.F. al borde de la eliminación en tan bonita competición, en la noche de ayer volvieron a verse murciélagos revoloteando en el corazón de la Ciudad del Turia. Sí, murciélagos que vieron gozar a un equipo de fútbol y a sus incondicionales como hacía tiempo que no lo hacían. Con fuerza y asustando al rival, ayer, la fórmula mágica pareció otra vez funcionar y el estadio de Mestalla volvió a vibrar...

Miles de aficionados, tanto locales como visitantes, se acercaron ayer al antiguo Luís Casanova con ganas de ver si Tintín y sus fieles escuderos habían sido capaces de levantar en pocos días a un equipo que se creía deshauciado. La empresa era ardua y difícil, pues las posibilidades de cambio se antojaban escasas tanto por tiempo, como por recursos y estado anímico. Como si todo aquello se hubiera olvidado, el equipo salió al campo con una mentalidad distinta. Salió a morder, a apretar al rival a desmostrar que quería ganar desde el primer minuto. Ya se intuyó en los abrazos iniciales y de esa mezcla explosiva salieron tres goles, uno de jugada de falta de Helguera y dos del reincorporado goleador David Villa, ambos tras magistrales jugadas fruto de la gran presión de los blanquinegros.

Destacaron individualidades, aunque sería injusto ensalzarlas por encima del valor del grupo. La grada disfrutó por ver a un equipo que supo imponer su personalidad en todas las facetas del juego; por ver a un capitán recuperado para la causa; a un Baraja peleón en balones que antes se daban por perdidos; a un Morientes entregado o a un Villa persistente; a unos centrales expeditidos y bien cubiertos en los flancos...Lo dicho, no sería adecuado aupar al primer escalafón a ninguno en particular y menos teniendo en cuenta que este no es más que el inicio de la batalla. Ayer, pareció encontrarse la primera pista de un camino hacia cimas muy altas. Camino que se prevee costoso si ciertas combinaciones tienden a olvidarse. Aunque como siempre, hagamos fuerza y suspiremos para que todos los acontecimientos anteriores hayan servido de didáctica reprimenda para el futuro.

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Desastre total

Pachanga, chiste, guateque, son solo algunos de los burlones calificativos con los que podríamos comparar el partido que el Valencia del novel Óscar Fernández jugó anoche contra el Real Madrid. Encuentro que no tuvo historia desde el primer minuto, cuando Raúl anotó el primer gol para los visitantes, y que hizo aún más grande la herida existente entre la afición local y su equipo, el cual parece dispuesto a naufragar un año más en cuanto a objetivos valientes se refiere.

Poco o nada del partido se puede apuntar. El Valencia salió con un planteamiento atrevido, que precisaba de un esfuerzo extra por parte de los jugadores para que fuera efectivo ante un equipo como el Real Madrid. Pero la cosa quedó en hechos y el Madrid manejó el partido a su merced. Tanto es así, que el equipo blanco sin hacer un gran desgaste se fue al descanso con una amplia renta en el casillero, 4-0.

La segunda parte, más de lo mismo, solo apuntar un leve atisbo de mejoría valencianista con el gol de Angulo, aunque quedó en eso y en varios aplausos de una grada un tanto aturdida por lo que estaba ocurriendo en el terreno de juego. El Madrid, en cuanto quiso, volvió a coger la manija y, ante la poca oposición de los de Mestalla, remató el partido con el quinto de la noche. Debió gustarles el número, porque si no no se explica cómo no consiguieron irse del feudo valencianista con un marcador más amplio a su favor.

No sabemos qué pasaría por la cabeza de Ronald Koeman, nuevo entrenador del Valencia, al ver y reflexionar sobre el partido de ayer. Tampoco sabemos qué hubiera pasado si el Valencia de anoche y de otras veces esta temporada, hubiera tenido ganas de jugar al fútbol, o qué habría ocurrido en el encuentro si el cancerbero che hubiese estado tan acertado como el del Real Madrid. Ahora, una vez acabada la "fiesta", lo correcto sería que cada uno recogiera lo suyo. Esperemos que el "dueño y sus ayudantes" se encarguen de reordenar el jaleo y de hacer la "limpieza" que crean necesaria, todo por el bien del disfrute en posteriores eventos.

PD. Enhorabuena al chaval de la cantera del Valencia, Montoro, por su debut en el partido de ayer. Esperemos que no quede ahí y que pueda dar muchas alegrías a una afición deseosa de savia nueva.

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Bienvenido Mr. Koeman

Si hace unos días anunciábamos el partido contra el Sevilla como "una prueba de juego" para el entonces entrenador blanquinegro Quique Sánchez Flores, hoy, unas jornadas más tarde, la noticia está en que el Valencia ha encontrado un sustituto para el banquillo de Mestalla: Ronald Koeman

"Cómo cambia el fútbol en tan sólo tres días. Lo mismo un día te levantas en la élite, que al día siguiente te encuentras en el paro". El fútbol es así, espectáculo y como tal lo "sufren" los que de alguna manera disfrutan y forman parte de él. Quique es uno más de los privilegiados que ha tenido el tiempo suficiente para demostrar su valía en un Club como el Valencia CF. En los dos años y pocos meses que ha estado al frente de la entidad de Mestalla ha generado más incertidumbres que halagos. Sus argumentos a la hora de gestionar la plantilla han sido más bien escasos y por ello, ni el objetivo mínimo le sirvió como declaración de amor hacia una afición deseosa de revivir glorias pasadas. Aunque bueno, no padezcan, Quique es joven y a buen seguro tendrá más oportunidades para demostrar que no sólo el nombre y la historia le llevaron un día a comandar una entidad como la de Mestalla. Le deseamos lo mejor...

Y ha llegado Koeman. Entrenador joven y holandés. Ganó mucho como jugador, ha ganado cosas como técnico. Los que han visto jugar a sus equipos, hablan de él como un preparador rocoso y arriesgado en sus formas. Otra cosa son los hechos, aunque ya se verá. Por el momento, viene con el cartel de ser el míster que conquistó con el PSV Eindhoven la pasada Eredivisie. Y lo hizo con un equipo joven. Argumentos y método, por tanto, parece no le faltan. Aguardemos a los hechos...

PD. Fran Escribá, valenciano, valencianista y segundo de Quique en el Valencia hasta su destitución la madrugada del domingo, ha declarado hoy al diario "Superdeporte" que su salida del club le ha supuesto "más un alivio, una alegría" que otra cosa. A su vez, ha dicho que "el Valencia para aspirar a ganar partidos y títulos necesita de la participación de Joaquín, Silva, Villa y Vicente. En caso contrario, es un equipo bueno, sin más".

Se me ocurren varias cosas, habría que pensarse lo de ser entrenador cuando te sientes profundamente agobiado por una presión que te has creado tú mismo al no saber solucionar los problemas y vicisitudes diarias de un equipo de élite.

Asimismo, si son tan determinantes esos cuatro jugadores, cosa por otro lado obvia, ¿a qué venía el cuento de las rotaciones? Y en ese caso, ¿para qué confeccionas una plantilla en la que has pedido y realizado la contratación de jugadores como Fernandes (18 millones de Euros), Zigic (18 millones), Arizmendi (6 millones) y Alexis (6 millones), si sabias que éstos no iban a ser piezas más que secundarias? Solo me queda una reflexión, que este señor, al igual que su compañero, se ha ido del Valencia de igual manera a como ha permanecido en el club estos últimos años: creando confusión y planteando más bien pocas soluciones.

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El secreto de Arizmendi

Todo el mundo se pregunta ¿quién vendrá como nuevo entrenador? ¿Será Deschamps, será Del Bosque o será Irureta? esos son mis favoritos, huyendo de los italianos, de imposibles como Mourinho y de infames como Radomir Antic. Suena de telón de fondo Scolari o incluso Koeman... yo me pregunto ¿no podían esperar al día siguiente para despedir a Quique? ¿de verdad es la solución? creo que no, es más ¿ha actuado Soler sabiamente? Éramos muchos los que defendiamos a Quique, pero no se nos oia. En cualquier caso ahora no hay vuelta de hoja... toca apoyar al que venga y desearle lo mejor. Esperemos que nos devuelva al lugar de donde nunca debimos salir y vuelvan, sea quien con quien sea, las glorias.

Pero todo el mundo anda despistado con el revuelo del entrenador, la verdadera pregunta es... ¿cual es el secreto de Arizmendi? ¿por qué se fichó...? yo lo sé y yo os lo diré... Javier es joven, aún le tiene que crecer el pelo, la nariz y las orejas. Angulo está en el final de su carrera, en máximo tres años se retirará o irá a morir a algún equipo de Asturias o de por aquí... y él le tomará el relevo. Será ese jugador que incomprensiblemente alinea el entrenador usando como parapeto su polivalencia que no calidad; advirtiendo de su garra, trabajo, entrega y coraje.

Prueba de fuego

Tras "ser bailado" en Noruega por el Rosenborg esta semana en partido de Champions, el Valencia vuelve al escenario de la Liga para enfrentarse a un Sevilla que esta temporada está sembrando más dudas de las que se esperaban cuando comenzó la nueva temporada. Y por si eso no fuera poco, además ahora lo del "caso Juande". ¿Se irá al Tottenham o se quedará todo en rumores y más rumores?

Lo único seguro el domingo es el reto que van a tener los de Quique Sánchez Flores: conquistar el feudo de uno de los grandes de la Liga, para así disipar las dudas creadas por una plantilla formada para triunfar, pero que en la actualidad se acerca demasiado a la mediocridad, tanto en su juego como en la forma de plantear de los partidos.

La frase del paleto

En vista de que el creador de este blog no actualiza, su colaborador os pone un aperitivo antes de que vuelva a postear. No voy a hacer una crónica del partido de ayer, no es lo mío y no podría hacerlo tan bien como él. Mi estilo y mis aportes son otros. Así que me voy a limitar en esta ocasión a mencionar una frase de la eterna promesa, José María Gutiérrez Hernández. Y que ustedes saquen sus propias conclusiones:

"¿Y qué ha ganado España con Luís Aragonés?"

Por el bien de este blog, del respeto a las personas y de fanáticos histéricos que puedan increparme, no haré comentarios.

Luis Aragonés 'el sabio cansado'

Aúno fuerzas, aun con la mente puesta en las útlimas 48 horas, hago acopio de valor para sentarme al frente de esto y hablaros de un tema de actualidad candente.

Leyendo el título de mi post posiblemente imaginéis que vaya a criticar a nuestro anciano y 'friki' entranador nacional. Frío, estais lejos de la realidad. El término cansado no lo utilizo para darle una connotación -esas que tanto le gustan a él- negativa de su estado. Más bien la uso para recalcar como debe estar de harto de todo el entorno, me explico:

Recientemente ha salido un vídeo en el que dice por activa y por pasiva que Raúl ha ido a 3 mundiales y 2 eurocopas y España no ha ganado nada. Según la prensa mesetera y mediática -supuestamente deportiva porque a mi cada vez con sus toques sensacionalistas me parece más del corazón- que a tanta presión le somete: Luis ha perdido los papeles... yo me pregunto ¿acaso nuestro seleccionador a dicho alguna mentira?

La afición, haga lo que haga Aragonés, le va a criticar. ¿Creeis en serio que Raúl es la solución a nuestros males? Luís fue un excelente jugador, pero ya no lo es, él no salta al campo y disputa los partidos... ¿dónde queda el sentido común que nos recuerda que los que juegan son los jugadores? además por culpa de determinados periódicos ahora sólo se apoya a los que no van ¡¡así no se ganan partidos ni se anima!! eso desmoraliza. Centrémonos en darle nuestro aliento a los que van sean quienes sean: ese es el deber de una buena afición- si es que la hay.

Reconozco que hace mucho tiempo que me borré de verla (aunque a escondidas os contaré que la veo, pero chst! es un secreto) Nos créemos buenos, es el principal problema: cuando en verdad hacemos el ridículo. Si miramos a cualquier lado veremos que en otros deportes somos los reyes, no pasa nada por admitir que el fútbol como selección no es lo nuestro, nunca llegaremos a la élite si no bajamos a pretensiones más reales. Lo que pasa es que nuestra liga es la mejor del mundo y queremos más, comprensible, pero prestemos atención: tenis, fórmula uno, baloncesto, voley, balonmano...

Volviendo al tema que nos ocupa. Luis tiene que estar hasta las narices del acoso y derribo que sufre por parte de la prensa y afición. ¿Dónde dejamos el respeto y educación? ¿Somos nosotros profesionales o lo es él? ¿Qué fácil es jugar a serlo, verdad?
Entiendo su silencio, es una forma fina de enviar a freir espárragos -por hablar bien- a todos. Debe de estar del tema Raúl hasta los mismísimos... eso se llama presión... y él lleva a quien quiere; para algo es él y no otro el seleccionador- que tanto se empeñó la prensa en colocar, justo la que lo quiere tirar curiosamente ahora.- señores esto es democracia, y nunca llueve (puffff nunca mejor dicho, niña) a gusto de todos.

Lo de intentar retirar el 7 ya fue bochornoso (el 10 de Maradona y Pelé sigue en sus respectivas y ellos son los únicos dioses del fútbol). Todo el mundo tiene su tiempo, Raúl ha sido uno de los mejores jugadores de España, nadie lo discute, la historia y los números están ahi. Pero nadie vive de su pasado y hay que ceder el puesto. Dejarle hueco a otros. ¿Cuantos españoles no van tampoco y se sentirán ofendidos por todo esto? El circo que se monta alrededor de su figura cada vez es lamentable. Desde aquí propongo la plataforma ¿por qué no va Cazorla -por decir alguien- a la selección? No sé si me explico.

El hombre está cansado de todo esto. ¿Va a pasar con todos los capitanes del Madrid? ¿tanto le va a costar el valor -osadía para otros- que tiene? ¿nadie recuerda cuando le mimó y dio oportunidad cuando peor estaba para demostrar que aun era válido? ahí nadie se quejó, claro.

Seamos inteligentes, el debate está desmesurado. Todo fruto de la prensa y de mentes influenciables. Eso sí es un despelote.

Salió cruz

Si sumamos el partido de ayer, son ya 11 los encuentros oficiales que ha jugado el Valencia C.F. entre Liga y Champions esta temporada. Duelos que han tenido dispar resultado pero una tónica común: mal juego y conformismo.

Ambiente alegre el de ayer en las gradas de Mestalla antes de comenzar el choque contra el R.C.D. Espanyol. Se buscaba cumplir eso de que los buenos resultados son la mejor fórmula para adquirir un juego dinámico y ambicioso. Se pretendía olvidar el partido del Chelsea, retomando el pulso a la Liga con una mejor imagen que en anteriores partidos.

Primero, salió cara. Un lanzamiento de córner a los cinco minutos de juego permitió a Baraja cabezear a la red el 1-0 cuando la gente aún comentaba a qué se debía la inclusión en el 11 inicial de la triple A: Alexis, Angulo y Arizmendi. No parecía el de ayer un día como para "rotar" a Joaquín ni a Helguera, sabiendo que lo próximo en el tiempo es un parón liguero de una semana por los compromisos de la Selección Española. Lo de Silva podía entenderse más debido a las incesantes molestias que viene arrastrando desde hace semanas en su tobillo. Aunque bueno, como dicen que el entrenador es el que más sabe por su posición, con el gol "Che" las dudas parecieron aparcarse.

Pero, por enésima vez, apareció la cruz. Casi sin descanso, tras una arrancada magistral de Villa, que se zafó de tres defensores para plantarse ante Kameni, que salvó sobre la linea, y la posterior lesión del delantero asturiano, que le mantendrá de baja unas tres semanas, el Valencia sufrió el cambio radical al que tiene acostumbrado a su afición cuando las cosas se ponen de cara demasiado pronto en casa, o desde el minuto uno, cuando juega como foráneo. Esa circunstancia de conformismo y nula tensión, unida a la alarmante falta de calidad que algunos de los jugadores valencianistas exhibieron el tiempo que estuvieron sobre el césped, provocaron que el Espanyol comenzara a moverse como pez en el agua en la zona de tres cuartos de campo. No le hizo falta ni utilizar a sus mediocentros que, viendo como los del Valencia se pegaban a los centrales, únicamente se dedicaron a amarrar los rebotes y a surtir de balones con facilidad a los cuatro de arriba pericos: Riera, Tamudo, Luís García y Valdo. Una excelente combinación entre ellos fue suficiente para que el primero celebrara su reciente convocatoria con la selección marcando un gol desde el pico izquierdo del área defendida ayer por Hildebrand. De aquí al final de la primera parte, fue el portero alemán el que evitó que el resultado se pusiera favorable para los visitantes con dos paradas "felinas".

Para la segunda parte, el míster valencianista trató de hacer bueno lo de rectificar es de sabios y con Silva sobre el campo desde la lesión del "Guaje" Villa, sacó a Joaquín para intentar contentar a una grada que comenzaba a vislumbrar un panorama desilusionante para el segundo acto. Pero lo de sabio le quedó grande, se quedó en aprendiz. Como si uno de ellos se tratara y no hubiera visto ningún partido del Espanyol, el Valencia comandado por Quique Sánchez Flores comenzó la reeanudación atacando por su banda derecha, dejando en la contraria una autopista únicamente vigilada por Valdo y Lacruz, jugadores que no se caracterizan precisamente por ser grandes defensores, lo que se agudiza si sumamos a todo esto la falta de velocidad del segundo, ex del Athletic de Bilbao. ¡A chocar contra el muro! Esa era la premisa, los argumentos: un Joaquín cuyas arrancadas comenzaban en camp propio; un Zigic peleón pero desubicado; un Angulo convencido de que hacer los 20 kilómetros marcha salvaría a su equipo del desastre; un Marchena excesivamente duro y poco centrado en el juego y un Silva demasiado "circense" para la causa. Así, y teniendo en cuenta que en la retaguardia esperaban plácidamente el despistado Alexis, el omnipresente Albiol, el vaivén Miguel y el confiado Moretti, un empate parecía lo más que podía sacar del envite de ayer el equipo de Mestalla. Lástima lo de Baraja, que volvió a demostrar su clase, a la vez que evidenció que la labor de salvapartidos tuvo que dejarla atrás comprensiblemente años atrás. Y así, el cambio de Zigic finiquitó el marcador local en cuanto a los goles. No parecía Angulo la mejor pareja de baile para Morientes. Tuvo que ser el "perico" Luís García el que en una arrancada y aprovechando el despiste del benjamín Alexis, que se quedó pidiendo el fuera de juego, le colará por debajo de las piernas el 1-2 al alemán Hildebrand. Lástima para el cancerbero valencianista que parece no tener la suerte de cara en lo que se refiere a los uno contra uno.

Así de larga, así de concisa se escribe la crónica de una muerte futbolísticamente anunciada. Lo que se denomina suerte o fortuna puntual se termina acabando si no está sujeta a unos mimbres sólidos de trabajo y concentración. Con el de ayer, son ya muchos los partidos en los que el Valencia ha dado la sensación de merecer perder esta temporada. El de ayer fue la cruz y ojalá el punto de inflexión para un equipo demasiado propenso a recurrir a tácticas esotéricas en un deporte en el que los resultados se dan corriendo y golpeando bien al balón. Confiemos, otra vez...

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Sobre Raúl y el número 7

¡Y se hizo la luz! Raúl Albiol, jugador del Valencia C.F, ha sido convocado por primera vez para defender los colores de la Selección Española de fútbol en los próximos compromisos que deberá jugar la misma. Estos son, uno de carácter amistoso ante Finlandia y el oficial ante Dinamarca, en el que el combinado español deberá dar la cara para poder jugar en la Eurocopa del próximo verano.

Desde aquí dar la más sentida enhorabuena a un defensor de físico espectacular y saber estar que, de seguir esta progresión, a buen seguro pasará a formar parte de la extensa nómina de centrales que han ayudado a escribir la brillante historia del equipo dueño del estadio de Mestalla.

Y sí, ya son siete. Aunque hoy la noticia esté en que otro Raúl no ha sido elegido por Luís Aragonés para disputar los próximos partidos con España, es el Valencia el equipo que más jugadores vuelve a aportar al combinado nacional, aspecto positivo o negativo según se mire. Seamos optimistas y centremos nuestra atención en clasificarnos para la cita que se presenta porque, debates a parte, el único Raúl que puede salvarnos de momento se apellida Albiol y, cuando el equipo salte al campo el próximo miércoles, quien portará en la espalda el número 7 será el mejor delantero español de los últimos años, David Villa.

P.D Raúl Albiol en estado puro. Tiembla Drogba que éste aprende rápido.

Por otro lado, para evitar malentendidos, apuntar que no tengo nada contra Raúl, delantero del Real Madrid. Al contrario me parece un gran jugador, a la vez que pienso que el debate en torno a él es desmesurado cada vez que tenemos un compromiso futbolístico con la Selección Española.

Vídeo: http://www.youtube.es/

Minutos de juego y resultados

Dicen que lo prometido es deuda, por ello si ayer dije que iba a realizar la crónica del Valencia-Getafe, hoy, pese a estar aquejado de un resfriado bastante molesto, ésta no podía faltar. Trataré de ser breve en la medida de lo posible.

Como si de un recién ascendido se tratara, el Getafe se presentó en Mestalla con una cara bien distinta a la que mostró el año pasado. Bien es cierto que en aquel momento venían comandados por el estratega que dirige ahora al Real Madrid y por un puñado de jugadores (los Güiza, Paredes, Alexis y compañía) que se acoplaban de forma ideal a la forma de juego y presión que propugnaba el técnico alemán Bernd Schuster.

El Valencia mientras tanto a lo suyo. A poco que los cuatro de arriba (Joaquín, Silva, Villa y Morientes) estén enchufados y los de atrás vayan cumpliendo (discreto Alexis que fue cogiéndose con el paso de los minutos), parece que este equipo podrá sacar muchos partidos adelante; eso sí, mientras las fuerzas le acompañen. Dos cero relativamente sencillo en la primera parte de ayer.

La otra cara de la moneda, la temporada es larga y cuando se baje una marcha habrá que ver cuál es el patrón de juego del equipo, más allá de las magníficas individualidades citadas. ¿Qué hubiera sido del partido de ayer si en lugar de Casquero (gran jugador por otra parte), la manija del Getafe la hubiera llevado un tal Senna? Hay que estar al detalle y éste fue ayer una relajación che que provocó un despiste y un sufrimiento del todo innecesario (2 a 1 final). Ya se pudo ver la temporada pasada, el visitante ayer, en un partido de cara como tuvieron ayer los de Sánchez Flores, no hubiera tenido ni un ápice de conformismo. Más bien te hubieran "clavado", como así hicieron, cuatro o tres goles según el día.

"Enfados" a parte, lo más sensato es desear una pronta recuperación, o por lo menos mentalización, tanto de Albelda como de Baraja. Si no es así, Quique debería empezar a tomar medidas, porque el próximo partido de su equipo es el del domingo contra el Recreativo de Huelva y porque el último título que se consiguió alzar en la ciudad del Turia queda cada vez más lejos...

Foto: www.valenciacf.es

Tengamos fe

Retomando Van Der Fútbol, tras unos días de reflexión, debemos realizar antes una ojeada a todo lo acontecido.

El primer partido se perdió contra un Villarreal que pasó por encima de nosotros, amén de la ayuda arbitral. Y dejó a la siempre impaciente afición mosqueada. El fichaje de Fernandes, pasó bastante desapercibido e incluso -como viene siendo habitual en la grada ché- se le criticó antes de verlo jugar. Ahora parece que todos aclaman su nombre y ponen el grito en el cielo porque nuestro supuesto mal entrenador no lo alinea. Debe ser por eso que no jugamos bien... claro. Sobretodo cuando nuestro equipo se caracteriza por ser un bloque: no un crack. Pero veamos. Contra el Almería no se jugó a nada, pero se ganó. Y contra el Valladolid más de lo mismo, se ganó sin jugar, con la suerte de cara, sin convencer. Con un ligero atisbo de mejora. Cuando Silva emuló a Moretti y logró el gol de la victoria in extremis de nuevo, la afición comenzó con el "Quique vete ya" Por su parte nuestro presidente se cabreó y habló con los peces gordos, y decidió -como hacía Palomino en La cosa nostra- mear fuera de tiesto con unas declaraciones inoportunas en RadioMarca.


Con todo esto arrancaba anoche el primer partido de Champions, la afición crispada tenía los cinco sentidos y parte del sexto puestos en el juego del Valencia. Un partido serio, de los que gustan a los entrenadores, Albiol providencial - que no vaya a la selección que " se joderá el invento", que decimos en mi casa - formó una pareja de baile perfecta con Iván. Y si bien empezamos mal, fuimos mejorando, nos fuimos encontrando poco a poco bien en el campo y reencontrándonos con las ideas. Estamos muy lejos del nivel que se espera, pero esa asistencia de Miguel y el gol de Villa alejan los malos pensamientos hasta el proximo partido. Además el Super-Chelsea no pasó del empate en su casa. Podría decir muchas cosas de Albelda, de Angulo y de Quique, todas malas. Pero debemos ser positivos -que me diría un gran amigo- paciencia, confiemos, ¿queremos que mejoren? pues que sientan nuestro apoyo, si cada uno rema en direcciones diferentes es dificil que se llegue a buen puerto. Desde aquí queremos enviar un mensaje, esto es como toda relación: sabíamos a lo que veníamos, a patir, para que esto fructifique debemos ser nosotros los que demos nuestro brazo a torcer a veces, es un toma y daca, hay que estar en las buenas y en las malas. Así se promete en el altar y yo juré fidelidad eterna a estos colores, ¿vosotros no?. Tener fe, mi abuelo decía que tener fe es creer en lo que no se ve, ahora no vemos nada pero si aun así creemos en ellos nos devolverán el apoyo con alegrías. Incondicionales, en eso se basa toda relación.

PD. No hace falta ser un excelente documentalista para saber que Groningen es una ciudad holandesa y no alemana como bien han puesto en marca.com, más que un periódico eso parece un panfleto.
PD2. ¡¡Qué selección tenemos!!, de basquet claro... enhorabuena a la de voley. Y ánimo para el prepotente pero excelente piloto que tenemos en la fórmula uno.



Fuente de la foto: valenciacf.es. Por aquello de los derechos, que la SGAE y Ramoncín últimamente ladran mucho -pero no morderán... en todo caso el anzuelo de barricadas.

¡¡Arranca la liga!!

Eso es, la emocionante liga española comienza en pocas horas. Vuelve el fútbol con fatatas -como diría el jugón e ídolo de masas- la "efe" de fútbol invadirá de nuevo cada fin de semana nuestros hogares. Vuelve la cita semanal con el balón, con el sofá o el bar, regresan los programas de análisis, las conversaciones con sus opiniones y discusiones sobre los partidos durante la semana, las hipotéticas alineaciones, el morbo de los derbis, declaraciones, las quinielas, el tiempo para criticar a los nuevos y a los de siempre, los partidos en casa, los nervios de que pasará este año en el que se aspira a todo de nuevo... se acabaron los anodinos domingos: vuelve nuestra dosis de ilusión, las jugadas y goles de la jornada, los cabreos, los transistores, las pipas, las polémicas arbitrales, la esperanza con forma de camiseta y escudo de diferentes colores, las lágrimas, los gritos, las penas y las alegrías, nuevos y espectaculares momentos para no olvidar que inventarán nuestros magos balompédicos.

La mejor liga del mundo con su capacidad de hacernos vibrar y olvidar por más de 90 minutos nuestros problemas llama de nuevo a la puerta dos meses después. La inyección de moral dominguera se llama LFP (Liga de fútbol profesional) y no nos iba a abandonar, más fiel que un perro no falla a su cita de todos los años. Bienvenida a casa una temporada más, te echábamos de menos amiga.

Y mirando concretamente en valencia, empezamos contra los vecinos del pueblo castellonense. El trofeo naranja dejó mal sabor de boca y arruinó la noche de gala... pero sólo era eso: una fiesta, y lo sabían. Ahora va lo serio, se acabaron las pruebas. El Villarreal no es el Parma. El marcador que rece al final del partido Mestalla juzgará los puntos que se obtengan por primera vez esta campaña. Y "el proyecto flores" ha enviado un mensaje ambicioso: a por todas, partido a partido, pero con mentalidad ganadora. Yo confío en este equipo; equilibrado y con calidad. ¡¡Qué vuelva a sonar el himno en Mestalla!!

Se llame como se llame el nuevo que han prometido traer antes de que finalice el periodo de fichajes -no será Van der Vaart- seguro que hará lo mejor por el equipo y es lo máximo que se le puede pedir. Esperemos que aporte técnica, porque trabajo, ganas y emepeño ya lo ponen todos, pero el tiempo se agota y el mercado limita emepezadas las competiciones europeas.

Desde aquí un mensaje al Super Barça, al intratable Sevilla, al (im)previsible Atleti, al monstruoso Madrid y al equipo revelación de este año (me intriga saber quien será): QUE GANE EL MEJOR.

PD: La Sexta empieza fuerte:
El sábado, en directo, grandísimo partido: el Sevilla-Getafe (22:00 h.). Y dos horas después el Murcia - Zaragoza, en diferido (Ocasión para ver al Murcia en primera). Ya el domingo, también en directo, emitirá el Valencia-Villarreal (21:00 h.). Gracias Dios!!!
PD2: No olvideis que en TVE este año también vamos a tener después de comer sábados y domingos partido de la liga inglesa.

El regreso del Valencia, una nueva esperanza.

3-0 rezaba el marcador al final del partido. No pude verlo en Mestalla- otra lo hizo por mí en modo corresponsal apuntando ya maneras como futura periodista-, pero sí lo hice por la televisión. ¿Impresiones? Hay equipo, se compenetran, tienen calidad y ganas, la moral está por las nubes... peeeeroooo pecaron de egoísmo todos. Nadie quería quedarse sin marcar. Si el resultado no fue mayor es porque se dedicaron a lucirse en lugar de ir a sentenciar de manera aplastante a un equipo que aquí jugaría con nuestros filiales. No nos cabe la mayor duda de que tanto Joaquín, como Villa y Vicente tienen una técnica y clase envidiables mas con generosidad el resultado hubiera sido más abultado. Quedémonos con el buen juego, las buenas vibraciones y sobretodo: la ilusión.

Tal vez no nos estemos reforzando como los demás, pero es que tal vez no lo necesitemos. Por lo que yo veo el Madrid con sus estrellas no da una a derechas. Lo que realmente necesita el conjunto ché es suerte en el apartado lesiones: recordemos que acabamos cuartos y luchamos por el título hasta el final con la enfermería llena. Y los que han venido no suenan a los típicos fichajes que luego no cuentan o pasan sin pena ni gloria a los que estamos acostumbrados: estos vienen a aportar su grano de arena en "el proyecto Flores", a partir de ahora me referiré al bloque y estrategia construida por el míster de esta forma (es lo que tiene pasar una tarde estupenda respirando entre la flora); Zigic, Alexis, Iván Helguera, Timo, Mata, Sunny... a buen precio y en los sitios necesarios. Ahora suena como la guinda del pastel Rafael Van der Vaart... es un sueño que si se cumple -siendo realistas es difícil ya que ni siquiera quieren oír nuestras ofertas, ni se dignan a rechazarlas- traería la magia definitiva a la camiseta blanquinegra. Ni Harry Potter y sus trucos de mago de tres al cuarto, que diría Gandalf, hacen sombra al holandés. Él quiere, ya ha aceptado un contrato para venir, esperemos que la presión fructifique y el Hamburgo acabe por aceptar. De momento (:P) el Valencia mejora la oferta y espera. ¿Lo veremos el sábado en la presentación? Desde Van Der Fútbol apoyamos a Van Der Vaart.

PD. Que la fuerza nos acompañe.
PD2. Me alegra que Joaquín haya hecho que tenga que rectificar mi opinión. Quin equip... ¡Ché qué bó!

Nikola

Nikola Zigic es el nuevo fichaje del Valencia C.F. El gigantón de 202 centímetros fue presentado ayer por Soler en Mestalla. El serbio ha costado en torno a los 20 millones, pero ahí figura el pago al Racing y su sueldo de los próximos 5 años. Mucho se comenta de si era necesario, yo pienso que si. Un equipo grande ha de caracterizarse por tener jugadores de diversa índole para cada posición: y el conjunto blanquinegro carecía de este tipo de delantero. Personalmente me gusta la incorporación, alto y con buen juego con los pies. Puede hacer buena pareja con Villa y completa la línea de ataque con Morientes, Arizmendi y Angulo. Aunque a este último ahora podrá desplazarlo más a la derecha para compartir minutos con Joaquín.

Leo en periódicos "mediáticos" de la meseta que el Valencia tiene overbooking en punta. Ponen a Silva e incluso a Mata también como delanteros, ¿ya nos tienen miedo que tratan de desestabilizar la plantilla?, y eso que aún falta por fichar ese centrocampista que le de toque de color creacionista al equipo... señores Silva y Mata juegan por la izquierda (Silva incluso por la derecha): competirán junto con Gavilán para hacerse con el hueco de Vicente alias "tobillos de cristal" que ha prometido volver a hacernos vibrar. No sobran, hacen que estemos bien dotados de calidad y preparados en todas las líneas del campo y que nadie se pueda dormir en los entrenamientos porque siente que el compañero puede robarle la titularidad. Competencia sana.

Nos han prometido por lo menos un fichaje más... Sneijder no será porque según parece lo han atado los merengues pero será un centrocampista para que luche con Baraja por su puesto. Sea quien sea, después de la cesión- y posterior lesión- de Hugo Viana y viendo el estado de Edu, espero que Sunny se quede para echarle una mano a Albelda... ya que el Recre pregunta por su cesión.

Bienvenido Nikola.

Sin noticias de nadie

Hoy me levanté y noté que era domingo a pesar de estar en vacaciones. Poca actividad, pensamientos espesos, negativamente pesimistas y profundos, recapitulación de la semana... día de pijama, de tele, día casero... y entonces caí: ¡mierda: sí, pero hoy no hay fútbol! mi moral y yo habíamos tocado fondo para acabar de arreglar el fatídico día.

El Valencia sigue brindándonos una serie de sin sabores veraniegos que empiezan a hastiar hasta al más paciente. Tenemos un buen equipo, una plantilla capaz de ganar títulos, la primera piedra del nuevo mestalla puesta ya junto al Palacio de Congresos-en Media Markt hablando en plata- la suerte de cara en la máxima competición europea, pero... aquí faltan caras nuevas. Caras que ilusionen y no huelan a refrito, que aporten otro grano de calidad, que hagan que el resto de jugadores no se duerman y luchen deportivamente por ponerle las cosas difíciles al míster a la hora de elegir el once.
Ahora, los más realistas, hablan de Casquero: un centrocampista nacional-otro más- de 31 años que no aportaría nada nuevo al grupo actual. No parece que haya mucho movimiento, y en cambio en nuestros más directos rivales si. El Barça ya ha hecho los deberes de verano, los hizo pronto para poder disfrutar y engrasar las piezas antes de que empiece el nuevo curso. El Madrid los empezó, y aunque lo dejará todo para última hora acabará cumpliendo sobre la bocina con algún fichaje sonado. El Atlético de Madrid hace como todos los años: se está preparando un equipo de talla mundial para, inexplicablemente, fracasar estrepitosamente después. Hasta los aficionados del Sevilla y Zaragoza ven más movimientos alentadores.

Soler está más pendiente del estadio, que por otra parte será una pasada. Miguel Ángel Ruíz promete dos fichajes para antes de la presentación y viendo lo que tantean miedo me da... de momento han cedido a Curro Torres al Murcia, que aunque es un adelanto creo que se olvidan de que tanto éste como Regueiro volverán de nuevo el año que viene y estaremos en las mismas...

Viendo el panorama sólo cabe esperar que Mata se quede y no lo cedan al Racing y desearles suerte a los nuestros cara a la previa de la Champions League. Jugaremos contra el ganador del partido Elfsborg (conjunto sueco) - Debrecen (equipo húngaro). El primer partido se jugará en Mestalla el martes 14 y la vuelta se jugará el miércoles 29 de Agosto con la liga ya empezada.

Mientras esperamos esa tormenta de verano que riegue nuestra motivación e ilusión, mejor quedarnos con el gol de Silva al Manchester City. Dicen que lo bueno se hace esperar pero que al final somos recompensados, la experiencia me dice que es cierto pero como va para largo lo mejor será abrirse una fantita de naranja, tumbarse en el sofá y el sábado 11, éste que viene, poner la tele después de comer que empieza la Premier League. El fútbol inglés en TVE apaciguará nuestra sed.

El indulto

Saludos a todos los valencianistas de corazón y amantes del fútbol en general. A partir de ahora, y si nadie le pone remedio, voy a postear yo también en este humilde rincón de fútbol donde mi gran amigo analiza los detalles que envuelven el mágico mundo de la esférica. Dicen que dos pares de ojos ven mejor que uno, y aunque mis dioptrías empiezan a preocupar, trataré de hacerlo lo mejor que sepa durante este mes de Agosto y compartiendo a su vuelta en septiembre las entradas del espacio. Olvidé presentarme: mi nombre es Álvaro.

Quique ha indultado a Del Horno. A priori veo que ha visto que el mandamás Soler no le va a fichar a un defensa cuando termine la odisea -por otro lado ya típica de cada verano- por ese jugador mediático que en esta ocasión lidie en el centro del campo. Y ve más fácil tragar y soportar al independentista de Asier y que traten después de ficharle a un delantero que más falta le hace.
Pero uno, que no suele conformarse con los primeros pensamientos que le rondan y le da vueltas a todo, ve a posteriori que el entrenador ché ha recapacitado, de sabios es rectificar, ha hablado con el vasco -que habrá prometido limitar sus fiestas- y ha preferido darle otra oportunidad. El míster sabe que condiciones tiene, que ha sido internacional y que figurar anteriormente en la plantilla del Chelsea es un buen aval. La afición espera ver resucitar a Del Horno, que recorra la banda con su pundonor y golpee esas faltas que antaño dolieron tanto en el coliseo de Mestalla. Puede ser un aliado esta temporada, Quique no es tonto, él tiene una libreta como Benítez, sólo que en la cabeza... y a veces la memoria juega malas pasadas.

Refresco de Verano

Como el que va y viene, hoy tengo la suerte de estar y de tener acceso a la red, por lo que he pensado en refrescar un poco el blog ante una avalancha de calor y de noticias que a la par parecen permanentes.

No quedamos contentos los valencianistas con el torneo celebrado el fin de semana pasado en el Emirates Stadium de Londres, casa del Arsenal del siglo XXI. Como en tiempo reciente, el equipo comandado por Quique Sánchez Flores volvió a demostrar que lo suyo son los contrastes; una de cal y una de arena que diría el cantante. Parece increíble, pero ganar a un equipo como el Inter (quizá mermado, pero los italianos aún así siguen siendo temibles) con gran juego no asegura que, 24 horas después, se pueda dar una imagen aceptable ante un rodado pero previsible Paris Saint Germain. Así de caprichosas son las rotaciones cuando se hacen de forma incorrecta o cuando se cree o se confía que se tiene una plantilla equilibrada. No emprenderemos el camino de la crítica, más que nada porque estamos en pretemporada, periodo de aprendizaje. Aprendamos, pues...

Hoy, además, tengo el placer de dar la bienvenida a un gran valencianista, a un mejor amigo que a buen seguro dará que hablar a partir de ahora con sus escritos e impresiones que tendremos el honor de leer en este pequeño blog. Alvaret, mejor dicho VlaoviColl, esperemos que tengas la misma puntería que el fenómeno croata y sepas dar en el clavo en cada noticia que comentes. Ánimo y bienvenido!

Lo dicho, pese a ser tarde y como ya se forma segura que no podré escribir hasta el comienzo de la liga, os deseo buen verano a los que aún os quedan días y a los que no un pequeño detalle: no os desesperéis con el Valencia, fichará a buen seguro, aunque la duda a estas alturas está en si lo que vendrá será bueno y seguro. Un saludo!!

"Per l'aire"

Reencuentro que parece bienvenida, vuelta a la "normalidad" deseada, las vacaciones. ¿Qué es lo que me he encontrado a mi regreso por la red Internet en lo que al Valencia C.F. se refiere? Partí con la idea de que la temporada recién terminada no iba a dejar a todo el mundo en su sitio. Alguien aniría per l'aire como le gusta decir al risueño "mandacadavezmás" blanquinegro; tendríamos un sustituto para el "guerrero" Ayala, con el que los delanteros rivales tuvieran miedo sólo al mirarle y para que pudiera ayudar a la formación de los jóvenes defensas de la plantilla; el equipo y sus retoques estarían perfilados completamente al inicio de la la pretemporada para no caer en errores pasados...

Sí, alguien se fue per l'aire y de muy malas formas, por cierto. Todo el mundo conoce ya la historia anterior y posterior que llevó a un icono del valencianismo a dejar de formar parte del club a mediados de Junio, y en el momento más crucial de la temporada, en el de perfilar la plantilla del próximo año.

Y llegó M.A.R. (Miguel Ángel Ruiz) desconocido para mi hasta ese momento (lo único que recuerdo del doblete es el y tal y tal y al magistral lanzador de faltas Milinko Pantic) con una labor complicada, difícil y cuanto menos semi-imposible. No nos engañemos, retocar una plantilla de garantías que quiere "aspirar a todo y dar miedo en Europa" (y eso no lo digo yo) a tres semanas vista para la pretemporada no es sencillo. Si tenemos en cuenta que ya no son tantos los días que restan ahora hasta ese momento nos podemos parar a pensar.

Ojalá los cambios sean para mejor, si el problema es el preparador físico, per l'aire, el director deportivo, per l'aire, el de la cafetería de Mestalla, per l'aire. Salvando a este último personaje al que no tengo el gusto de conocer y al que cito en tono cariñoso-jocoso, parece que el recurso de tirar per l'aire se está acabando y con él la paciencia de los valencianistas. Se puede llamar Forlán, Lucho, Wesley, Helguera, Milito, Milikito o Pepet el de L'Horta, pero si no hay un trabajo previo y meticuloso es difícil que los fichajes lleguen a buen puerto y si lo hacen será a coste desorbitado y dañino para las arcas del club. Confiemos en el trabajo de los que están, no tanto en el tiempo que tienen para realizar la labor antes citada y esperemos que lo próximo que vaya per l'aire sea un título y no un gran castillo de fuegos, fuegos artificiales...

Foto: www.jornada.unam.mx

"Objetivitis satisfetus"

Esta noche ha vuelto la Liga tras el parón "internacional". Lo ha hecho con emoción; con partidos vibrantes; con desilusión en algunos casos; hasta con alegría desmedida si me apuráis. Pero, por desgracia, en todos los "barrios" no ha brillado igual el sol. En unos han "sentido", mientras en otros se ha perdido ya lo poco que quedaba, si es que aún quedaba algo.

Permitirme seguir al hilo de lo que recientemente he apuntado. Aunque antes de nada he de señalar que, en lo que sigue, intentaré prescindir de milongas pasajeras y cabreos puntuales. Venimos de una semana complicada futbolística en cuanto a horarios. Pocos entrenamientos, muchos partidos de selección. Pero bueno, la rutina volvió y con ello lo hicieron las dudas y amarguras que dejó la última jornada de Liga a equipos como el Valencia. Una derrota dolorosa, un nefasto recuerdo de color amarillo y una afición bien atenta, hacían que las buenas palabras y la esperanza fueran lo mínimo que se podía esperar de los protagonistas blanquinegros en vistas al derbi de la ciudad del Turia. Pero como ha demostrado la cruda realidad vestida de goles, de poco sirvió todo lo dicho.

No considero relevante ni importante apuntar detalles futbolísticos sobre el partido que hoy han librado Levante y Valencia. No lo haré porque creo que primero, si no se ha hecho ya, en las próximas horas se hablará del mismo ampliamente; y segundo, soy tajantemente poco partidario de dar excusas, por mínimas que están fuesen y aunque vistan de negro, blanco amarillo o toquen un silbato. Si que soy, por contra, de los que piensan que el Valencia está "enfermo", "débil". No quiero con esto faltar al respeto ni a la institución, ni al estadio ni a la afición , Dios me libre de ello. Sólo intento exponer el planteamiento que lleva rondándome tiempo por la cabeza y que , pese a no ser médico, creo que coincide con todos los síntomas de una alteración emocional grave: el Valencia está "enfermo" de ilusión. Como ya les pasara a otros equipos antaño, dígase Madrid, Barcelona o Arsenal, por citar algunos ejemplos, el equipo che ha ido quemando las fases de tan extraña anomalía hasta llegar a la noche de hoy, en la que se ha escenificado la necesidad urgente de una cura a fin de una buena recuperación. Lo más preocupante es que estos síntomas han pasado a la grada, con lo que ha dejado de sorprender que Cañizares no salga de debajo de los palos, para hacerlo que la afición no quiera ver a su equipo ni por televisión; que no extrañe que Albelda deambule por un terreno de juego, para que nos sorprenda ahora la ira de un sector de la grada ante la pasividad del médico jefe, Quique Sánchez Flores. Y así podría seguir con una infinidad de ejemplos nunca malintencionados.

Repito que no quiero ni pretendo ser ventajista con este análisis. Al igual que considero que algunos jugadores no han estado a la altura por diversos motivos, pienso que la falta de ambición generalizada mostrada durante estas dos últimas temporadas, unido a la cantidad de recursos verbales empleados para justificar-injustificables actuaciones y hechos, están quemando a una afición siempre entregada por un club ahora "enfermo". Se apuntó el comienzo de una nueva época en la que se dejaba atrás las más brillante de la historia del club. No sería fácil el camino, se sabía, pero numerosos sinsabores sufridos durante dos temporadas posteriores parecían acercar más a la meta. Juventud y veteranía, ¡qué gran mezcla!, decían algunos. Juventud y anarquía, mal combinado, apuntan ahora otros. El fútbol y sus aficionados viven del presente y de la esperanza en un brillante futuro. Ahora mismo, esta frase no existe ni se vislumbra en el Valencia. Solo se me ocurre pensar que, a estas alturas, lejos de teorías sobre objetivos, cada uno sabrá lo que ha "ayudado" para que el club esté en este punto: cada vez más hundido y sin rumbo fijo.

P.D. Triste despedida de uno de los grandes. Ojalá no sea este el definitivo punto final y el Valencia sepa homenajear como se merece a uno de los más grandes. De todas formas y hasta que ese momento llegue, ¡mil gracias Ayala por todos estos años!

Foto: mas.lne.es

Corta y descafeinada

Tras un pequeño parón motivado por compromisos estudiantiles, vuelven los post a este blog y lo hacen de la mejor manera posible: comentando la Final de la UEFA Champions League. Dos adjetivos he escogido para encabezar mi particular visión. Dos adjetivos más propios de un café que de un acontecimiento deportivo, pero que, a mi parecer, definieron tanto la final de ayer, como las fuerzas y juego de los dos equipos que salieron a competir por el cetro europeo en el gran escenario ateniense. Mejor vayamos por partes.

Comenzaré por el final, o por el principio según se mire. El duelo de ayer sin duda no deparó una de las mejores batallas futbolísticas que se recuerdan en los últimos años. El entorno de una final "pesa" y es ahí donde quizá el Milan jugó sus mejores bazas para llevarse un encuentro digno de los mejores veteranos. Lo intentó el Liverpool desde el principio ante una squadra que disfruta defendiendo acometidas rivales (¿Maldini no tiene 27 años?). Tanto chocar contra el muro, los de Merseyside comenzaron a flaquear. ¿Dónde estaba ese Milan de contragolpe letal y ligeramente inexperto en lo de ahorrar fuerzas? Se preguntaron ayer muchos de los jugadores de Benítez que habían estudiado a conciencia que les podía deparar el choque. Mientras tanto, los italianos a lo suyo. Sabían que su oportunidad les llegaría. Su bloque atrás con los caciques Nesta y Maldini en faena, unido a la calidad de sus jugadores de ataque y la admirable facultad del "Pipo" Inzaghi de hacer cosas importantes en los momentos oportunos, hacían que en un partido como el de ayer un gol valiera algo más que medio título europeo. Al final no fue uno, sino dos los tantos que subieron al marcador de los milanistas, pero poco se le puede reprochar por ello a un equipo entregado y disciplinado como el de la ciudad de los Beatles. Hasta el final mantuvieron "vivito y coleando" ese espíritu que les hizo campeones en Estambul, aunque delante se encontraron con un Milan que se las sabe todas y que te mata cuando menos te los esperas.

No me querría olvidar de otro detalle que me pareció importante y en cierta manera decisivo en un duelo como el de ayer. Cortas, sí, fueron las energías del equipo red ayer. Aunque es justo apuntar que poco se puede reprochar a un Liverpool que ha llegado hasta ese punto a estas alturas de la temporada. Tampoco el colegiado ayudó a separar el citado calificativo del encuentro de ayer. Pitar el final cuando restan 15 segundos para que se cumpla el tiempo, teniendo en cuenta, además, que en la prolongación se llegó a jugar un minuto escaso es, cuanto menos, digno de mención. Quedará la duda de qué hubiera ocurrido si el Liverpool hubiera utilizado mejor sus fuerzas o si el árbitro del encuentro hubiera sido más estricto con el tiempo del mismo. Pero eso es lo bonito del fútbol, que aunque no se pueda volver atrás, siempre hay una ocasión en el futuro para resarcirse de los malos tragos y las dudas, una revancha en tono futbolístico...

En fin, no queda más que felicitar al gran Milan por su trabajo esta temporada. Una faena, todo hay que decirlo, que no dejaba más que dudas al principio del curso, pero que ha demostrado al final estar hecha de un modo impecable. También felicitar al Liverpool y a todo su cuerpo técnico por la gran labor que están realizando. La que les está llevando de ser un melancólico club que intentaba volver a sus orígenes, a establecerse como uno de los equipos más temibles del viejo continente europeo. Continuará...

Foto: www.repubblica.it

De sabores, sinsabores y magia futbolística

Hoy es un día de resaca futbolera. Resaca que, tras una final, a unos les sabe a gloria, mientras que a otros les resulta del todo amarga. Nada que ver con el día de ayer a estas mismas horas, donde la ilusión y la esperanza reinaban por igual en los dos bandos que más tarde se batirían en duelo deportivo. Uno quedó ganador de forma merecida, aunque el otro contendiente no mereció ni merece un calificativo menor.

El Sevilla fue justo vencedor, no de forma amplia, pero el saber estar y jugar los momentos clave es claro síntoma de equipo ganador. Quizá en la memoria se quede el recuerdo de la gran carrera de Palop tras detener el último penalti de la final, o tal vez el increíble tanto que firmó y que catapultó de forma indudable a su equipo hacia Glasgow. Pero no hay que desmerecer la labor de una plantilla que, a mi modo de ver, se ha consolidado como una de las mejores de Europa. Ahora el saber mantenerse es el mayor examen que les queda a un equipo y a un presidente, sobretodo este último, que se están acostumbrando al "caviar" del fútbol; un sabor que ayer pudo pasarles una mala pasada.

Nada que objetar y mucho que felicitar a un Espanyol que mostró ayer una de las caras bonitas del fútbol, la entrega, y de paso enseñó a todo el mundo el potencial de la Liga que disfrutamos cada fin de semana. Nuestros equipos, con todos los respetos, "medios" son los más "grandes" en la actualidad. Lo dicho, toda una demostración clara de que con motivación y con garra en esto del fútbol muchas veces se pueden sortear obstáculos físicos y técnicos superiores. Ayer no hubo suerte, pero es lo que tiene eso de la lotería (entiéndase, los penaltis) que por muchos boletos que compres, nunca sabes cuando te puede tocar.

Solo me queda comentar, ya en el ámbito propiamente valencianista, que el día de ayer también sirvió para informarnos del fichaje del hasta junio jugador del Getafe Alexis Ruano por el Valencia. Gran incorporación que, si no recuerdo mal, a sus dotes demostradas como marcador, une un físico y una polivalencia que le permiten jugar de lateral derecho de forma satisfactoria. Este año no recuerdo que haya actuado en esa posición, pero sea como sea es una gran noticia ya que, a buen seguro, este jugador aumentará las posibilidades y la competencia de una plantilla que debe volver a consagrarse como una de las mejores del panorama europeo. Hasta ese momento, que lo marcarán tanto el tiempo como los objetivos cumplidos, solo queda esperar y apurar las opciones que quedan en esta campaña. Ejemplos como el de ayer pueden servir, sin duda, como grandes empujes...


P.D. Lástima lo de los seguidores que ayer no pudieron volar para ver la final al ser víctimas de una estafa. Esperemos se encuentren a los sinvergüenzas causantes de tal engaño. Y tirón de orejas para Edu Gaspar, jugador del Valencia, ya que al parecer su estado físico no es mucho mejor que el que tenía cuando se fue a Brasil a recuperarse de la grave lesión de rodilla que sufrió hace seis meses. Ojalá se solucione satisfactoriamente o si no es así, de una explicación convincente, si no si que podría estar escribiendo su último capitulo como valencianista. Toda una pena...

Foto: www.shanghaidaily.com

La noche del 21

Mestalla vivió ayer una noche de reencuentros: la vuelta de Baraja al equipo tras su reciente lesión (aunque se mantuvo en el banquillo), el retorno de un juego de toque olvidado en ciertas fases de la temporada y lo más importante, el regreso de un jugador "marcado" por el valencianismo. No podía ser otro, Pablo, Pablito Aimar.

Ambiente numeroso, aunque tímido y expectante en el recibimiento al equipo blanquinegro. Enfrente, nada más y nada menos, se encontraba el ofensivo Zaragoza que, de la mano de Víctor Fernández, esta temporada parece estar poniendo los cimientos de un gran conjunto en el futuro cercano. Poco varió el sistema que viene utilizando habitualmente, de no ser por la entrada de Óscar y el sacrificio de un medio más de trabajo como Celades. Así pues, "Cinco defensas y cinco delanteros" fue la apuesta inicial del equipo visitante al inicio del choque. Demasiado atrevimiento, se podría pensar, cuando delante se encontraba un Valencia que ha cogido el último tren de la Liga en clara posición ascendente. Comenzaron avisando Joaquín y un cada vez más animado Silva, ambos con diversas entradas por banda. Mientras tanto, Marchena y Albelda parecían controlar la parcela medular del campo. Con este panorama, el gol no tardaría en llegar. Así fue, tras un rechace en el área, el extremo andaluz puso la directa, enfiló la banda y sacó un centro rematado por el 21 canario en semi-fallo. Moretti que pasaba por allí colocó la pierna en la trayectoria del balón y, de paso, el primer gol en el marcador. A partir de aquí el empuje valencianista fue cada vez mayor, todo ante la mirad de un Zaragoza que no veía la forma de hacerse con el balón. Zapater creyó tener el remedio a esa situación, aunque se equivocó de escenario, el área, y de víctima, David Silva, para hacerse con el "cuero", con lo que la jugada acabó en penalti. Falló Villa, aunque el calor ambiental mantuvo constante la "temperatura" de la grada. A ello también ayudó que el 21 del Valencia no tardara en volver a hacerse con las riendas del partido. En esas, se produjo el momento mágico de la noche: gran combinación del valencia desde la defensa y posteriormente en banda derecha, que acaba con el balón a los pies de Silva cerca del poste derecho de la portería del Zaragoza. "Paradita, miradita" y balón a la red. 2-0 y final de la primera parte. Aún dio tiempo para que el portero del Zaragoza, César, departiera un poco con los aficionados local situados detrás de su porteria, aunque los malos modos le jugaron una mala pasada, por lo que se fue al vestuario con una tarjeta amarilla.

La segunda parte debía ser distinta para el equipo visitante si quería llevarse algo positivo del choque. Sabían sus jugadores que debían mantener el balón y la calidad de sus cinco atacantes haría todo lo demás. Fue el momento de ver a los Aimar, D'Alessandro, Milito y compañía disfrutar como no lo habían hecho en el primer periodo. También fue el rato donde se puedo ver a un Albelda contrariado y desacertado, debido a los problemas físicos que le llevan lastrando gran parte de la temporada y que le reaparecieron en esa fase del choque. Sufría su capitán, sufría el Valencia, aunque el objetivo de la victoria parecía del todo encarrilado. Un par de retoques, el ya anunciado de Albelda por Hugo Viana y la salida de Gavilán, dieron un poco de oxígeno al equipo local que comenzó a realizar diversos ataques de peligro sobre la portería maña. No parecía ser tampoco la noche de David Villa, aunque el papel principal esta vez lo interpretaron a la perfección los ya mencionados Joaquín y el "artista" Silva. A destacar de aquí al final del encuentro lo enteros que llegaron los jugadores del equipo blanquinegro a esa fase del choque, en comparación con otro partidos recientes de la temporada.

En fin, ayer noche no hubo lugar al debate sobre el recibimiento del ex-21, Aimar. Fue más bien una visita en tono dulce y que tuvo como colofón un recuerdo sonoro imborrable en la memoria de los aficionados valencianistas: el ya famoso "vamos, Pablito Aimar".

En cuanto al actual 21 del Valencia, parece dispuesto más que nunca a tomar el testigo de su antecesor. No haré comparaciones, que aunque dicen que son odiosas, se podrían agradecer en este caso. Sólo diré que talento y calidad hay, como ya hubo, para rato. Esperemos aprovecharlo de la mejor manera posible...

Foto: www.valenciacf.es

"¿Ande andará?"

Sí, la pregunta va referida a Edu, ese jugador de físico imponente, de técnica exquisita y también, por lo que ha demostrado hasta el momento, de un carácter fenomenal. Esta cuestión, nos la venimos haciendo muchos valencianistas desde hace semanas y aún más desde la reaparición de Gavilán, que se lesióno a poca distancia temporal de él. Parece que el jugador disfruta de un permiso concedido por el club, pero lo extenso del mismo, unido a la "polémica" que produjo su visita a Valencia a raíz de los comentarios que emitió sobre la famosa dieta del equipo, hacen que su ausencia en el tramo final de Liga comience a parecer cuanto menos "extraña".

Se comentaba la semana pasada que su aparición se produciría a lo largo de esta. Ayer se hablaba que tenía previsto volver en las próximas horas. Sea como sea, el debate está servido. Actualmente, el Valencia está intentando confeccionar una plantilla que esté totalmente lista para el comienzo de la pretemporada próxima. Ésa es la intención y así se están siguiendo los pasos oportunos. Entre las posiciones que se consideran prioritarias está la de mediocentro organizador, la misma que ocupa nuestro protagonista. Sneijder, Lucas Leiva, De la Peña... la lista de nombres es, cuanto menos, amplia. De concretarse alguno de estos fichajes, serían cuatro los jugadores en plantilla que ocuparían esta posición (los ya conocidos Baraja, Edu, Viana y el llamémosle X). El suceso más probable desde ese momento sería la salida de Hugo Viana, ya sea como cedido o como moneda de cambio en alguna operación, pero seguiriían quedando tres. Quizá podría explicarse esta hipotética situación de tres hombres en el puesto por los problemas físicos del "Pipo" Baraja y del propio Edu (ha sido operado de las dos rodillas), y se asemejaría a la que esta temporada se ha dado en la banda izquierda por la "marcha" física de Vicente (Vicente, Gavilán, Regueiro y el propio Silva para un puesto). Personalmente, no veo a un Baraja recién renovado haciendo las veces de "tercero" en la lista y desconfío de los que dudan del físico de Edu (si se ha recuperado Pires con más años y un físico "inferior", el brasileño lo hará sin problemas).

No quiero ser malpensado, pero se comenta que al jugador ya le han hecho la "cruz" por sus declaraciones. También se dice que diversos estamentos del club no se están del todo contentos con la tardanza en su vuelta, algo que hablaría muy mal de la coordinación del organigrama valencianista ya que el jugador goza de un permiso que alguien le habrá dado, suponemos, concienzudamente. Sea lo que sea, en todo este enredo lo claro es que Edu, en el poco tiempo que ha podido, ha demostrado con la camiseta del Valencia que clase y maneras le sobran para llevar el timón del equipo. En el ambiente, no sólo en el espacio, Edu parece haber desaparecido del panorama valencianista. Se han olvidado sus buenas actuaciones y pronto se entregará un relevo. Un caso extraño sin duda, esperaremos a lo que depararán los acontecimientos...

Foto: www.lasprovincias.es

Ya tocaba

Después de tiempo inmemorial sin ganar un partido fuera de casa, ayer el Valencia recobró las buenas sensaciones en el campo de Riazor. Y además lo hizo con concentración y fútbol, aunque no faltó la dosis de "patiment" habitual ya , por otra parte, para su sufrida afición.

Salió el Deportivo de la Coruña con todo lo que tiene: juventud, físico y correr y más correr. Pero falló en un aspecto fundamental para poder ganar a un equipo como el Valencia, el achique de espacios. Por fin el entrenador blanquinegro aprendió de errores pasados y apostó de inicio por Viana y Marchena en el medio del campo, dejando a Albiol en su sitio: el centro de la defensa. Es habitual en el mundo del fútbol caer una y otra vez en los mismos errores, unas veces por un ego desmedido, otras por simple desconocimiento de los mismos. Por suerte ayer fue un día lúcido para los que comandan la tropa y por primera vez en mucho tiempo fuera de casa , se salió a ganar el partido desde el inicio. El Valencia renegó del patadón y comenzó a acariciar el cuero de un lado a otro, a sabiendas de la floja presión que ejercía el rival. Paciencia era la clave y así cayó el primer gol en el saco: jugada de Silva en el pico del área del Deportivo y Viana, que como buen mediocentro acompañaba la jugada, empujó en la red el balón suelto.

Poco más que decir y pocos más argumentos tenía el equipo local para la segunda parte. El único "as" que guardaba en la manga Caparrós, el técnico blanquiazul, era el rematador Taborda y la jugada le salió redonda. Falta dudosa en el borde del area, cambio extraño y el uruguayo que, pese a ser el más peligroso en los balones colgados, queda cubierto por Marchena. Como si estuviera ya escrito, el balón acaba en la red de la porteria de un cada vez más poco acertado en las salidas Cañizares. A partir de aquí volvieron las dudas y el nerviosismo visitante, pero ahí, cuando más se necesitaba, reapareció la ambición y la calidad en las botas de Villa, Angulo y Silva, que marcó el 2-1 tras un bonito contragolpe del citado triunvirato. Mención a parte merecen los últimos minutos del choque y el poco saber estar del Valencia en esa situación (gili-córner innecesario que provoca un contraataque, balón echado fuera de banda de forma incomprensible para hacer un cambio), algo que puede disculparse por lo poco habitual de la victoria de ayer.

En fin, un triunfo importantísimo más y muchas dudas disipadas. Aunque me queda una pregunta en la mente: ¿por qué el equipo malgasta ofensivamente y no defiende con claridad las jugadas a balón parado? Muchos técnicos parecen tener la respuesta, pero en el mundo del fútbol nunca se sabe...

Foto: www.valenciacf.es